Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El Gobierno de Tamaulipas cedió ante las presiones de los ejidatarios de varias comunidades del municipio de Villa de Casas, que amenazaron con cerrar la carretera el día de hoy si no cumplían la promesa de suministrarles agua potable.
Dulce María Alvarado Hernández, vocera del grupo de manifestantes que ayer cerraron parcialmente la carretera Zaragoza-Victoria, a la altura del kilómetro 49,explicó hoy por la mañana que habían llegado ya varios camiones-cisterna para entregarles el vital líquido a las familias.
Además reveló que también están ya reparando el desperfecto que sufrió la bomba que succiona el agua de un abastecimiento subterráneo, que tiene más de 4 meses de estar en estas condiciones.
Alvarado Hernández, sostuvo que los vecinos de los ejidos: Lázaro Cárdenas, Praxedis Balboa, Algodones, 5 de febrero y 19 de abril, habían sentenciado a las autoridades con cerrar definitivamente la carretera, en caso de no obtener una respuesta favorable a sus demandas.
El día de ayer el Director de la Secretaría General de Gobierno, Jorge Vega Sánchez, se presentó en el lugar donde estalló el conflicto, para resolver esta problemática que llevó a los vecinos a empoderarse y a exigir de esta manera sus derechos ciudadanos.