En
lugar de resolver las demandas de los morelenses, se reprime y amenaza de
muerte a sus líderes
Carlos Martínez Leal
Hace veintitrés años campesinos morelenses
se organizaron en las filas de Antorcha Campesina, hoy Movimiento Antorchista
Nacional (MAN), iniciaron una lucha por mejorar sus comunidades, las cuales
como las de muchos estados del país enfrentaban y enfrentan grandes carencias.
Veamos.
Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la
Política de Desarrollo Social (CONEVAL), en el 2010, del total de la población
del Estado de Morelos, 778 mil se encontraban en situación de pobreza, el 43.7%
y 125 mil se encontraban en pobreza extrema, el 7%, 613 mil se encontraban en
situación de población vulnerable por carencia social el 35% y 97 mil en
situación vulnerable por ingreso, el 5%, dejando solo a 293 mil morelenses como
NO POBRES y NO VULNERABLES, es decir, de 1 millón 781 mil habitantes, 1 millón
488 mil están en situación “vulnerable”; para que lo entendamos, en “pobreza”,
el 80% de la población.
Esto puede explicar que en los comicios
electorales recientes para elegir Gobernador del Estado, el Partido de la
Revolución Democrática (PRD) se alzara con el triunfo, con el Lic. Graco
Luis Ramírez Garrido Abreu como su
candidato; todo fue entusiasmo, ¡el pueblo de Morelos nuevamente se pone a la
cabeza con un líder que representa las aspiraciones de los más humildes!, ¡los
pobres tienen ahora un representante en el Gobierno de Morelos!, esto y más se
decía entre la gente, bueno e incluso, hubo quien llevado por la euforia
comparo al Lic. Graco, con el líder revolucionario Emiliano Zapata Salazar,
porque dijo, de todos los líderes de la “izquierda mexicana” el Lic. Graco Ramírez Abreu, es de
los más lúcidos y consecuentes.
Los
grupos antorchistas y sus líderes que como dije al principio vienen luchando
desde hace veintitrés años, construyendo la herramienta que haga posible la
educación política del pueblo humilde –que
como ya vimos por las cifras del CONEVAL es la mayoría– para que se organice y
luche por transformar su realidad, se presentaron con todo respeto y haciendo
uso de sus garantías constitucionales ante las instancias gubernamentales para
entregar su pliego petitorio y
solicitar, decía ya ¡CON TODO RESPETO!, audiencia con el recién electo
Gobernador y porque no, también con el entusiasmo de, ahora sí, contar con un
interlocutor que conoce y siente la problemática de los que menos tienen.
Sin embargo han pasado meses y años, así
como comisiones, marchas y plantones, a los que se ha tenido que recurrir para
lograr que se les programe una audiencia con el Gobernador del Estado. Estando
en dicha audiencia y cuando parecía que se estaban dando soluciones, el Señor
Gobernador se retiró sin explicación alguna y sus auxiliares no solo no
continuaron con la audiencia, la suspendieron, retirándose también, por lo que
las demandas de los más humildes de Morelos, siguen esperando una solución.
El posible lector puede preguntarse y con
justa razón ¿pues qué es lo que piden los antorchistas morelenses? y la
respuesta es, nada que no sea una necesidad y que además no esté dentro de las
garantías constitucionales de todo mexicano: artículo tercero, educación; reconocimiento
oficial de una preparatoria que ha cubierto todos los requisitos para su
aprobación. Aquí hay que recordar que tiene dos o más años que la legislatura
federal elevó a rango de ley ¡LA OBLIGATORIEDAD DE LA EDUCACION MEDIA
SUPERIOR!, entonces ¿por qué se niega en
Morelos?, en donde gobierna un “representante auténtico” de los necesitados de
la educación. Y si esto, que es un mandato de ley, se niega, también se niega
el apoyo para la construcción de un albergue estudiantil en la Capital del
Estado, Cuernavaca, que reciba, aloje y alimente a los hijos de los campesinos
pobres que desean que sus hijos estudien y que estaban entusiasmados con el
nuevo Gobierno, pues decían, “seguramente él (el Lic. Graco) también batalló en
su juventud, para lograr hacer una carrera, ¡ POR ESO NOS VA HA ENTENDER!, la
realidad nos dice que ¡NO!.
Artículo
cuarto; Vivienda; “toda familia tiene derecho a disfrutar de vivienda digna y
decorosa”, cuatrocientas familias morelenses están
solicitando vivienda y no tienen solución. Articulo
veinticinco, “corresponde al estado… el fomento del crecimiento económico del
empleo y una más justa distribución del ingreso y la riqueza…”; en obra
social, las comunidades del Municipio de Totolapan (Achichipico, Yecapixtla y
San Marcos), solicitan caminos, puentes vehiculares, obras de electrificación,
no hay solución. “Artículo veintisiete;
fracción vigesima”; “El Estado promoverá las condiciones para el desarrollo
rural integral… con obras de infraestructura… así como apoyar la producción
agropecuaria…”, los campesinos morelenses están pidiendo la perforación de
pozos, para dotar de agua a sus comunidades, así como el apoyo para setenta
proyectos productivos. Y tampoco hay respuesta. Como se puede ver las demandas
además de ser necesarias, son de elemental justicia, las demandan además los
más humildes, quienes se entusiasmaron con el “nuevo Gobierno”.
Se está cometiendo otra flagrante
violación al estado de derecho que rige a los mexicanos, pues además de negarse
a resolver las legítimas demandas de los morelenses, se está amenazando con
privar de la vida a la abnegada, brillante y esforzada líder de los
antorchistas, la Ing. Agrónomo Soledad Solís Córdova, así como a sus compañeros
del Comité Estatal, violándose los artículos: “séptimo”, “ninguna persona se
perseguirá por sus ideas; “octavo”, “derecho de petición”; “noveno”, “derecho
de organización y manifestación”; “dieciséis”, “nadie puede ser molestado, si
no en virtud de mandato de autoridad”; “diecisiete”, “ninguna persona podrá
hacer justicia, ó ejercer violencia por si sola”.
La ingeniero Soledad Solís Córdova, sus
compañeros líderes y todos los antorchistas de Morelos, merecen un
reconocimiento del pueblo humilde organizado en las filas del antorchismo y de
los mexicanos, pues ellos sí, han retomado la bandera de la libertad, del ansia
de justicia, de la necesidad de reivindicación, de una vida sin miseria, sin
hambre, sin explotación, sin pobreza, que movió al pueblo de México y
concretamente al del sur y norte del país, que encabezados por sus líderes
Emiliano Zapata y Francisco Villa protagonizaron los momentos más memorables de
la Revolución Democrática-burguesa del pasado siglo en nuestro país y de la
cual salió triunfadora la clase poderosa, la dueña del dinero, la burguesía que
nos ha gobernado durante estos ya casi cien años, siendo sin embargo el paso necesario
para hoy poder aspirar al Gobierno del pueblo pobre organizado, de la clase
productora de la riqueza, el proletariado.
Por ello es que los antorchistas
tamaulipecos, responsabilizamos al Gobierno del Licenciado Graco Ramírez Abreu
del bienestar de nuestros compañeros y le solicitamos con todo respeto como
mexicanos que somos, se resuelvan las demandas de los morelenses que menos
tienen, pues es su legítimo derecho y además Usted se comprometió a resolver en
la audiencia que les concedió.
A los antorchistas morelenses y a su
líder, nuestra querida compañera Ing. Soledad Solís Córdova, les informamos que
los antorchistas tamaulipecos estamos trabajando día con día en la tarea del
uno por uno, pues es el mejor apoyo que nos podemos dar los antorchistas, y
estamos difundiendo su lucha, estamos con la campaña nacional de denuncia y
estaremos con ustedes de ser necesario, en cuanto nos hagan el llamado; son un
ejemplo para el antorchismo nacional con su lucha y solo de esta manera
podremos cumplir con la tarea de acabar con la pobreza, y con la tarea que nos
encomendó nuestro líder nacional el Ing. Aquiles Córdova Morán de organizar a
diez millones de mexicanos para poder cambiar el actual modelo económico que
solo está generando más pobreza.
¡Adelante compañeros de Morelos, estamos
con ustedes!.