A través de un proyecto científico,
especialistas de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) buscan incrementar
la concentración de ácido linoleico conjugado (ALC o CLA por sus siglas en
inglés) en la carne de bovinos, con la meta de añadir un valor nutricional al
producto y contribuir en la salud de los consumidores.
La investigadora de la Facultad de Medicina
Veterinaria y Zootecnia (FMVZ), Dra. Yuridia Bautista Martínez, dijo que el
proyecto se enmarca en los trabajos del Cuerpo Académico de Producción Animal,
y forma parte de sus líneas de investigación relacionadas a la economía de los
productos agropecuarios; mercado y análisis de precios; y calidad y valor
agregado de los productos de origen animal.
“En la línea de valor agregado de los productos
de origen animal, estamos trabajando en el proyecto “Perfil lipídico de carne
de bovino en el estado de Tamaulipas”, que consiste en determinar la
concentración de ácidos grasos que están presentes en la carne”, comentó.
“Estamos interesados en la concentración del
ácido linoleico conjugado, porque le atribuyen propiedades anticancerígenas y
prevención de enfermedades como diabetes e hipertensión”.
“Y se ha estudiado que ese ácido se encuentra
en una mayor concentración en animales que vienen del pastoreo”, indicó.
Refirió que la primera parte del trabajo es
determinar la concentración del ALC, que existe tanto en animales que vienen
del pastoreo, como de aquellos que provienen del estabulado (establo).
“Para después buscar estrategias para incrementar
este ácido graso en carne. Y de tener resultados favorables sería un beneficio
muy importante para los productores”, añadió.
En este sentido, apuntó que se afecta mucho el
precio cuando los animales vienen con grasa amarilla, pero si se logra
certificar que tienen un alto contenido de ácido linoleico conjugado, se les
estaría pagando por generar alimentos con valor agregado que tendría beneficio
para la salud de los consumidores.
Señaló que actualmente están tomando las
muestras de los animales que llegan al rastro de la FMVZ, “ya hicimos un perfil
lipídico de varias muestras, en grasa y en carne, y sí se han encontrado
diferencias en la concentración de los ácidos grasos”.
Añadió que en países como Estados Unidos, se empiezan
a vender productos con ALC añadido, destacando los beneficios en la salud del
consumidor, “y los precios sí son diferentes, pero si hay un mercado de
personas que consume este tipo de alimentos”, concluyó.
La Dra. Yuridia Bautista Martínez, forma parte
de la planta docente y de investigación en la UAT; es egresada del Colegio de
Posgraduados, del programa de maestría y doctorado de Mejoramiento Genético y
Producción Animal; ha realizado estancias científicas en la Universidad de
Wisconsin–Madison, Estados Unidos; y es experta también en estudio, diseño y
análisis de los sistemas alimentarios.






