El presidente Andrés Manuel López Obrador presentó el Cuarto Informe de Gobierno en Palacio Nacional, en el que destacó la recuperación económica de México y los resultados de la administración que encabeza, los cuales confirman que “estamos saliendo adelante”.
En el ejercicio establecido en la Constitución, el mandatario aseguró que el proyecto de transformación ha demostrado su efectividad frente a circunstancias adversas, como la pandemia de COVID-19 y la guerra entre Rusia y Ucrania.
“Aun con los graves problemas externos que hemos enfrentado, (…) en nuestro país los datos indican que estamos mejorando. Particularmente, nos han ayudado dos buenos factores: la estrategia de apoyo a los de abajo y las ventajas del tratado comercial con Estados Unidos y Canadá”, señaló.
Con el mural de Diego Rivera de fondo en la escalera principal de Palacio Nacional, el jefe del Ejecutivo reafirmó que el gobierno federal tiene como prioridad la atención a la población pobre, la cual ha disminuido porque se procura una mejor distribución de la riqueza.
“No basta el crecimiento económico, sino que es indispensable la justicia. En la nueva política económica, moral y social que hemos aplicado desde el principio de nuestro gobierno, se ha desechado la obsesión tecnocrática de medirlo todo en función de indicadores de crecimiento que no necesariamente reflejan las realidades sociales. Nosotros consideramos que lo fundamental no es cuantitativo sino cualitativo: la distribución equitativa del ingreso y de la riqueza”, enfatizó.
Sostuvo que el fin último de un Estado es crear las condiciones para que la población viva feliz, por lo que el crecimiento económico y los incrementos en la productividad y la competitividad no tienen sentido como objetivos en sí mismos, sino como medios para lograr un propósito superior: el bienestar general, material y del alma entre la población.
“Más allá del simple crecimiento económico, lo fundamental estriba en desterrar la corrupción y los privilegios para destinar todo lo obtenido y ahorrado en beneficio de la mayoría del pueblo y, de manera especial, de los más pobres y marginados”, expresó.
Gobierno impulsa distribución de la riqueza a través de Programas para el Bienestar
El presidente afirmó que los Programas para el Bienestar son el principal distintivo del gobierno y el mecanismo de distribución de la riqueza; estas iniciativas, dijo, están orientadas a mejorar las condiciones de vida y de trabajo de la mayoría de la población y se entregan con prioridad a los más pobres.
“Los Programas para el Bienestar, la recuperación del poder adquisitivo de los salarios y el aumento en las remesas enviadas por nuestros queridos paisanos a sus familiares, han mejorado la situación económica de la población más pobre del país y, al garantizarse cuando menos lo básico, se ha mantenido la paz y ha permanecido encendida la llama de la esperanza”, acotó.
Ante la doctora Beatriz Gutiérrez Müller e integrantes del Gabinete Legal y Ampliado que lo acompañaron, el presidente dio a conocer que, de 2018 a 2020, los adultos mayores incrementaron su ingreso promedio trimestral por persona de 12 mil 420 pesos a 13 mil 586 pesos. Actualmente acceden al beneficio de pensión 10 millones 500 mil personas adultas mayores.
Gracias a los Programas para el Bienestar, el ingreso trimestral por persona de la población indígena aumentó 13.16 por ciento, es decir, de 8 mil 887 pesos a 10 mil 057 pesos.
“Según el CONEVAL, en el segundo trimestre de este año, el ingreso laboral real por persona se incrementó en 4.8 por ciento, pues pasó de 2 mil 747 pesos a 2 mil 880, en comparación con el mismo periodo de 2021”, refirió.
La pensión a un millón de niñas y niños pobres con discapacidad se está ampliando a otras edades a partir de la celebración de convenios con los gobiernos estatales y pronto será universal, añadió.
Además, se otorgan becas a 11 millones de estudiantes desde preescolar hasta posgrado y 2 millones 315 mil jóvenes han trabajado como aprendices en Jóvenes Construyendo el Futuro; reciben un ingreso equivalente a un salario mínimo y, de todos ellos, la mitad es contratada por la empresa o centro de trabajo que ejerció la tutoría.
A través de Sembrando Vida, se apoya con un jornal permanente a 449 mil 570 sembradores que trabajan cultivando sus tierras en una extensión total de 1 millón 123 mil 925 hectáreas, organizados en 18 mil 615 Comunidades de Aprendizaje Campesino, con 15 mil 132 viveros y biofábricas en 21 estados de la República.