Con la finalidad de que la Dimensión Episcopal de la Pastoral de Movilidad Humana, de la comision de pastoral social, dependiente de la CEM(Conferencia del Episcopado Mexicano) logre una visión más amplia del trabajo legislativo que se realiza en el tema de migración, la presidenta de la comisión de asuntos migratorios de la cámara baja, Rosa González Azcárraga, dictó una conferencia magistral sobre las condiciones que guarda dicho fenómeno social en el país, pues advirtió la necesidad de reorganizar las instituciones y tres órdenes de gobierno, realizando un trabajo de mayor cooperación, donde además de recursos y apoyo, vaya implícito el humanismo, solidaridad y justicia social.
A invitación de dicha comisión pastoral y dentro del foro denominado «Construir el Futuro con los Migrantes y Refugiados» llevado a cabo en la Universidad La Salle, de la cdmx, la legisladora porteña expuso el panorama que guarda el tema migratorio en México, es decir sus avances, retos y coyunturas actuales.
Ante estudiantes, asistentes e invitados, la presidenta de la comisión en el congreso de la unión, enfatizó que la agenda legislativa es extensa, donde grupos sociales y la Iglesia, también tienen cabida en el ánimo de lograr un mayor orden y atención en la migración.
«No hay acto mas humano que migrar. No se entiende la historia de la humanidad sin su deseo e impulso para desplazarse a nuevos territorios», comentó en su introducción la congresista del PAN.
Remarcó que por su situación geográfica, México es un país de origen,tránsito, destino, refugio y retorno de personas migrantes.
«En años recientes el país ha experimentado un crecimiento notable en la cantidad de migrantes internacionales, sea que pasen o se queden en nuestro territorio», y citó que los principales países de origen de las personas migrantes en México, son Estados Unidos, Venezuela, Guatemala, Honduras y el Salvador.
Enfatizó que la ley de migración publicada en 2010 ha dado resultados satisfactorios en la protección de miles de migrantes, a la qué se han incorporado varias reformas, sin embargo, dijo, hace falta una política de Estado, que redefina la vocación del país.
«Es decir, necesitamos pasar de una visión de control, a una donde se garanticen los derechos de las personas y fomentar una cultura de apertura e integración para quien desee permanecer», explicó
Rosa González dijo que es necesario ordenar la movilidad internacional, construir capacidades institucionales para la atención y recepción de altos volúmenes de personas de otras naciones que piden protección.
Abundó que el fenómeno social impacta en las relaciones de una comunidad, lo cual abre el riesgo a la xenofobia, por lo que es necesario plantear retos de integración y combate a la discriminación.
Puntualizó la necesidad de reorganizar las instituciones de los tres órdenes de gobierno, alentando la cooperación y responsabilidad compartida en la política y gestión migratoria.
Finalmente, dentro de su ponencia enfatizó que todos las organizaciones de ayuda, sociedad civil e iglesia, abonan en apoyo para atenuar el sufrimiento de los migrantes, siendo mas humanistas, justos y solidarios con dicho sector poblacional.
La legisladora compartió el foro con otros ponentes, como la senadora Beatriz Paredes Rangel; Luis Raúl González Pérez, titular del programa de derechos humanos de la UNAM; y Giovanni Lepri, representante del alto comisionado de la ONU para los refugiados en Mexico; ademas del padre Julio López, secretario ejecutivo de la DEPMH y el rector de la Universidad LaSalle, Francisco Flores Gamio.