Luego de los lamentables hechos en donde al menos 38 inmigrantes, en su mayoría de origen venezolano y guatemalteco, murieran calcinados en un incendio en instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) de Ciudad Juárez, el diputado federal Gerardo Peña Flores, reiteró al gobierno federal la urgencia de establecer un puente aéreo para la repatriación de los indocumentados a sus países de origen.
En los primeros días de febrero, el legislador señaló la imperante necesidad de dar solución a la problemática que representa el tema migratorio que cada día va en aumento, derivados del acuerdo entre México y Estados Unidos.
Como consecuencia del anuncio de Estados Unidos sobre las nuevas medidas en materia migratoria, que incluyen la deportación inmediata de migrantes de Haití, Venezuela, Nicaragua y Cuba que lleguen por tierra bajo el título 42, la presencia de inmigrantes en la zona se ha intensificado en la franja fronteriza de este país con México.
Ante un gobierno que se proclama humanista, urge que el presidente Andrés Manuel López Obrador actúe con acciones precisas que atienda la urgencia de los ciudadanos mexicanos de la frontera que en los últimos años tiene que lidiar con los problemas derivados ocasionados por los miles de migrantes varados en municipios fronterizos, señaló Peña Flores.
Reiteró que las afectaciones que trae consigo este asunto por demás preocupante, en su vida y derechos humanos, repercute en el rubro de seguridad, salud, en el comercio y libertad de movimiento, por mencionar algunas de las secuelas del flujo migratorio ilegal.
El legislador sostiene, ante los recientes acontecimientos, que se requieren acciones inmediatas para evitar que vuelva a ocurrir una tragedia de esta magnitud, y confía que, ante esto, la respuesta del mandatario federal sea favorable para la creación del puente aéreo en Tamaulipas y en los estados fronterizos.