España se encuentra inmersa en un clima invernal durante la Semana Santa, con la borrasca Nelson provocando un temporal que ha traído lluvias generalizadas y nevadas a varias partes del país, incluyendo áreas sorprendentemente bajas como Madrid. A medida que las celebraciones de Semana Santa están en pleno apogeo, las condiciones climáticas han tomado un giro inesperado, con precipitaciones que se prevén continúen hasta el domingo de Resurrección.
Las zonas más afectadas por la nieve han sido los grandes sistemas montañosos de la península, donde este martes se han registrado las nevadas más significativas de la temporada, afectando cotas desde los 600 metros. Ciudades como Madrid y Baeza en Jaén han presenciado este fenómeno, acompañado de avisos amarillos por acumulaciones de nieve importantes.
A pesar de un incremento en las temperaturas y de la cota de nieve previsto para el resto de la semana, las precipitaciones desde el Atlántico mantendrán a las nevadas confinadas a las zonas altas. Sin embargo, la acumulación de nieve continuará, particularmente en los Pirineos, donde se esperan más de 60 centímetros de nieve nueva. Otras cordilleras como la Cantábrica, el sistema Central y las sierras del sureste, incluyendo Sierra Nevada, recibirán cantidades significativas de nieve que oscilan entre los 20 y 50 centímetros, con algunas áreas superando estos montos.
Este inusual giro climático plantea desafíos para los eventos al aire libre y las tradiciones de Semana Santa, obligando a ajustes en los planes y a preparaciones especiales para enfrentar las inclemencias del tiempo.
Your article helped me a lot, is there any more related content? Thanks!