Cientos de trabajadores, ciudadanos y actores políticos se movilizaron ayer desde el Monumento a la Revolución hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en una marcha que buscaba hacer frente a la reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF), la cual será discutida hoy en la Cámara de Diputados. Los manifestantes expresaron que esta enmienda representa un retroceso en el sistema de justicia del país, pues vulnera sus derechos laborales y pone en riesgo la carrera judicial, considerada uno de los métodos más efectivos para seleccionar jueces.
Durante la movilización, el magistrado del primer circuito, Juan Pablo Gómez Fierro, enfatizó la necesidad de una reforma de justicia integral en México. Según sus palabras, «el país necesita una reforma de justicia que aborde desde la seguridad pública, hasta las fiscalías y la justicia local, mejorando además la carrera a nivel federal». Gómez Fierro advirtió que los cambios propuestos a la Constitución, centrados en la elección de jueces, magistrados y ministros mediante voto popular, podrían priorizar la suerte y la popularidad sobre el mérito y la capacidad.
Por su parte, Marisela Gutiérrez Galindo, actuaria con 25 años de servicio en el juzgado cuarto de distrito en Acapulco, Guerrero, destacó que el proyecto de reforma afecta directamente los derechos de los empleados del PJF al no respetar la carrera judicial. «No podemos tener juzgadores independientes si no existe un Estado democrático y de derecho», afirmó.
La marcha, que reunió a unas 2 mil personas, incluyó la participación de figuras políticas como José Ángel Gurría Treviño, ex secretario general de la OCDE y colaborador cercano de la ex candidata presidencial Xóchitl Gálvez. Gurría señaló que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) podría ser clave para detener la reforma. «Dependemos del Trife, dependemos de lo que diga el tribunal. Si decide que no a la sobrerrepresentación, entonces no pasará», declaró.
Durante el trayecto, las consignas como «¡Sin Poder Judicial, quién te va a amparar!» resonaron en las calles, captando la atención de transeúntes y generando confrontaciones con algunos espectadores. Jesús Téllez, un hombre mayor, expresó su desacuerdo con la marcha, señalando que la reforma es necesaria para combatir lo que él percibe como privilegios injustos en el sistema judicial.
Al llegar a la SCJN, el grupo fue recibido por cerca de 100 personas que ya los esperaban. Entre ellas, Maribel Datafoya, secretaria proyectista del quinto circuito, tomó la palabra para subrayar que la reforma no respeta el proceso de selección meritocrático que ha caracterizado a la carrera judicial. «Éramos evaluados 3 mil 800 o más personas que participábamos por 30 plazas. Ahora no será así si se aprueba la reforma», comentó.
Hoy lunes, los empleados del PJF tienen planeada otra manifestación, esta vez frente al Ángel de la Independencia a las 19 horas, en un intento más por defender sus derechos y la justicia en México.