El presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., el republicano Mike Johnson, presentó este domingo un proyecto de ley para extender el presupuesto de las agencias federales durante tres meses, con el fin de evitar un cierre parcial de la Administración el 1 de octubre, fecha en la que se agotarían los fondos actuales.
La iniciativa excluye una cláusula que el expresidente Donald Trump (2017-2021), candidato republicano para los comicios de noviembre, había solicitado incluir con el objetivo de imponer nuevos requisitos para que los ciudadanos demuestren su nacionalidad al registrarse para votar, una medida a la que los demócratas ya habían expresado su oposición.
Johnson anunció la propuesta en una carta dirigida a sus correligionarios republicanos, publicada apenas ocho días antes de que se agote la actual financiación discrecional del Gobierno, cifrada en 1,2 billones de dólares, lo cual ocurriría en la medianoche del 30 de septiembre al 1 de octubre, inicio del próximo año fiscal.
Según un asesor del liderazgo republicano en la Cámara Baja, citado por el medio especializado Roll Call, se prevé que la votación del proyecto de ley tenga lugar este miércoles.
Ambas formaciones políticas en el Congreso están interesadas en evitar un cierre administrativo debido a la proximidad de las elecciones del 5 de noviembre, en las que se enfrentarán por la Casa Blanca Trump y la vicepresidenta y aspirante demócrata Kamala Harris. Además, se elegirán a todos los miembros de la Cámara Baja y a un tercio de los senadores.
«Como la historia ha enseñado y las encuestas actuales confirman, cerrar el Gobierno a menos de 40 días de unas elecciones cruciales sería un acto de negligencia política», afirmó Johnson en su carta.
De aprobarse, el proyecto permitirá que la Administración se financie hasta el 20 de diciembre, aplazando cualquier batalla partidista hasta después de las elecciones del 5 de noviembre.
Si los dos partidos no logran aprobar una prórroga presupuestaria, esto conllevaría el cierre de la mayoría de las agencias gubernamentales, museos y parques nacionales, mientras que cientos de miles de funcionarios se quedarían temporalmente sin trabajo y sueldo.
El último cierre de este tipo ocurrió durante la presidencia de Trump y fue, con 35 días (del 22 de diciembre de 2018 al 29 de enero de 2019), el más prolongado de la historia.